jueves, 19 de marzo de 2009

La Radio, sólo para entendidos

La radio, ¡que medio este! para algunos maravilloso, en los que me incluyo, y para otros completamente indiferente, casi imperceptible. Si bien debo reconocer que hace tiempo me despegue como actor y espectador, estoy en condiciones de afirmar que es amor, y como el todo amor a veces necesitas despegarte para reencontrarte de una manera distinta y volver mucho más renovado.
Y si del medio hablamos, su protagonista estelar es la voz, y cuantos gestos uno puede hacer con la voz. Su imaginación sin rastro visible pero con fuerza y conceptualización hace que el misterio y la magia también sea aditamentos que completan un cóctel extrtaordinario.
La propagación de las FM en la pasada década fue un golpe sustancial en la radio y también en la actividad periodística. Muchos se jactaron de ser líderes de opinión sin siquiera hacer un propio análisis de sus vidas. La diversidad que el medio propuso en este sentido fue negativa, por ser falsa y no hacer más que repetir con lo erstablecido, aquellos espacios pagos de FM a nombre de cualquiera, no intimidaron a los monopolios, sino más bien le hicieron el caldo aún mas gordo.
En este contexto el medio fue sacado de su ambiente, dejo de manejar los tiempos de la información para ser la información y la urgencia, la voragine, la que maneje esos tiempos. Además de empobrecerse desde adentro con gente que no puede cumplir con determinadas expectativas informativas. Se expandió la radio, se masificó y sin duda perdió su impronta original.
Ahora, su presencia y fuerza son innegables. Muchos la daban por muerta con el surgimiento primeramente de la televisión, e imaginense cuando internet manejo laescena, peor panorama se vislumbraba aún. Pero quien escucha radio ama imaginar y eso no se cambia por nada, descontando también que al día es el único medio que se adapto a todas las circunstancias: auto, colectivo, trabajo, calle, etc.
Como cierre de toda esta cuestión radio, quiero que sepas que no me aleje de vos por tu defectos, sino por losdefectos de quienes te integran, de como piensan, de sus formas de producir, más bien desusformas de lucrar por sobre la capacidad para lareflexión y el desarrollo cultural. Pero bueno, es la realidad, habrá que pelear para cambiarla, para que de una vez por todas prime lacapacidad por sobre el negocio, y que esa capacidad les genere competencia a aquellos que con plata, la tapan.